Vaya por donde vaya, la moda flamenca se encuentra siempre con una fiesta: ferias, romerías, fiestas mayores de los pueblos… Todo es celebración y fiesta. Y como tal, los volantes llevan inherentes ese punto de glamour, de etiqueta, de gala o de alfombra roja. Vestirse de flamenca es un ritual similar al vestirse de novia o a ponerse un vestido para un día especial en el que sabes que todas las miradas van a estar puestas en ti… Tengas corona o no, el traje de flamenca hace que quieras ser Reina por un día. Y para ello nada mejor que los brillos, encajes, detalles y colores de la nueva colección de Javier García.
Para vestir a ‘La Reina del Baile‘, el joven estepeño le pone los detalles típicos de las reinas de las fiestas, le añade la dosis de glamour propio de las misses (complementos de Antonio Arcos mediante) y redondea el momento con la música que acompaña a la reina del baile de instituto americano que tanto vemos en las películas. Una verdadera fiesta coloreada con tonos tropicales y veraniegos como amarillo, verde, aguamarina, coral, blanco, malva, plata, buganvilla… Colores desvinculados de los que vimos en su anterior propuesta y que nos traen a una flamenca más coqueta, con un aire más desenfadado e incluso algo de marcada personalidad propia. Y es que, con tan solo dos colecciones, Javier García ha logrado hacerse un hueco gracias a una moda flamenca muy suya, que no recuerda a nadie y en la que el diseñador va acercando a su antojo cada uno de los patrones del traje de flamenca para reinventarlos a su manera. No faltan, como marca de la casa que son, los canasteros y las mangas húngaras, dos ideas que el año pasado fueron lo más destacado de su colección y que aquí repiten junto a muchas mangas de encajes, puños elaborados o volantes muy trabajados. Buenas ideas que contrastan con la aparente sencillez de las faldas, donde los volantes aparecen con un patronaje que se entrega a los volúmenes canasteros, a la caída de las sedad o a los pequeños detalles que aparecen en algunos de los diseños. Al unirlo todo vemos glamour y moda flamenca sin caer en el brilli-brilli porque sí por parte de un diseñador que sabe manejar el punto medio que hay entre la espectacularidad de la pasarela y la finalidad comercial de un traje de flamenca.
En líneas generales: Javier García se consolida en SIMOF con una colección que mantiene su esencia y personalidad propia dentro de la moda flamenca pero con una paleta de colores más primaveral y menos saturada que el de su predecesora.
Destacamos: los puños, volantes y mangas, especialmente las de encaje, vuelven a ser las grandes bazas creativas de Javier.
Ahora suena: “Dancin’ Queen” de Abba.
Nuestra selección: nos quedamos con el canastero blanco con detalles en aguamarina, el estampado en este mismo color con motivos florales y el amarillo con polipiel plateada.
Puedes contactar con el diseñador por Facebook o Twitter.
